Jaspe
El arte único de Jasper es el de la naturaleza misma: un sol dorado, un cielo nocturno, campos de amapolas o un bosque verde profundo, arenas del desierto, el océano ondulado, cañones de rocas rojas, montañas extensas. Cada piedra es una obra maestra del Creador, de estilo audaz y primitivo, de forma sólida y terrenal, con una energía cálida y armoniosa que resuena con el yo primordial.
Una piedra elemental de la Tierra, la frecuencia de Jasper es lenta y constante, alineada con las energías electromagnéticas del planeta. Le permite a uno estar más presente en el cuerpo físico y ser consciente de la naturaleza y del entorno. Alienta a uno a celebrar momentos de aislamiento para absorber, reflexionar y conectarse con estas energías y enciende la conciencia de la conexión espiritual que tenemos con todos los seres vivos.
Esta piedra se puede usar para alinear las energías de los chakras para facilitar un viaje astral seguro,
Históricamente, Jasper es rastreable para todos los pueblos y civilizaciones antiguas. Usado por chamanes, sacerdotes y reyes, se consideraba sagrado y una poderosa piedra de protección, tanto para el mundo físico como en el ámbito espiritual. Los amuletos de Jasper fueron tallados por los egipcios con símbolos e inscripciones del Libro de los Muertos y enterrados con restos momificados para un paso seguro en el más allá. Fue muy utilizado en muchas culturas para grabar sellos de cilindros, anillos de sello y talismanes especiales que representan imágenes astrológicas y religiosas.
Jasper es excelente para curar y mantener los cuerpos físicos y emocionales durante una lesión, enfermedad prolongada u hospitalización. Sus energías terrestres aportan fuerza gradual y vitalidad renovada, al tiempo que ayudan a comprender y soportar estas experiencias frustrantes o dolorosas.